Me acerqué más y de repente del autobús bajó un chico rubio con gafas de sol, y con una camiseta azul. El chico se quitó las gafas y vi claramente quien era.
- ¡¡NIALL!! - corrí y lo abracé hasta dejarlo sin aire. Me puse a llorar de emoción. - ¿Qué haces aquí?
- No he venido solo. - y por la puerta del autobús salió Louis.
- ¡¡LOU!! - también lo abracé y de repente bajó Ana del autobús. - Huy perdón. Un momento... ¡¡ANA!! - y como no, la abracé.
- Jajajaja te perdono. Te he echado mucho de menos.
- Yo más.
- No creas.
- Basta de cursiladas, te dejas alguien muy importante... -saltó Louis.
- ¿Dónde está Kevin?
- Aquí mismo.
- ¡¡KEVIN!!
- No lo toques.
- ¡Vale!, ¡Vale!
Y aún quedaba más, pues del big red bus bajó Liam.
- ¡¡LEEYUM!! - fue él quien me abrazó, pero muy fuerte.
- Me alegro de verte.
Ahora llegó Zayn. Zayn se sacó las gafas de sol y miró a Jane de una forma muy misteriosa. Yo también la miré, y ella le devolvió la mirada misteriosa.
- ¡¡ZAYN!! -esta vez, tampoco no hacia falta que me esforzara, para rodear a Zayn con mis brazos, ya que el ya me estaba abrazando a mí. - ¿Y qué os trae por aquí?
- No fue idea mía. - dijo Louis.
- Ni mía tampoco. - afirmó Nialler.
- Pero mía si. - dijo una voz seductora, la única que yo quería escuchar.
Y entonces giré la cabeza, y allí estaba, tan perfecto como siempre, Harry Edward Styles. Todo y estar un poco mosqueada con él, no pude evitar una enorme sonrisa.
- Ha... Har... Harry... - él caminó hacia donde yo estaba, se aproximo para besarme y me tocó la cara con su mano pero... … yo le aparté su cálida mano.
- ¿Qué pasa? - sentí 14 ojos clavados en nosotros.
- Harry no sabes por lo que me has hecho pasar.
- ¡Pero si sólo han sido 15 días!
- ¿Qué? ¿Sólo 15? ¿Te parece poco o qué?
- ¡Olvidalo! ¡Ahora ya estoy aquí! ¡No me volveré a ir!
- No creo que pueda.
- Subid.- nos dijo Niall.
- ¿A dónde vamos? - le pregunté.
- A Londres, ya hemos hablado con vuestros padres y os han hecho las maletas.
- Dios mío, ¡Sois lo mejor!
Me despedí de mis padres, y subí junto con mis amigos... y Harry... Me senté con él, Niall con Sol, Louis con Ana, y con Kevin, y Jane con Zayn. Escuché la conversación de estos últimos.
-¿Cómo te llamas? - preguntó Zayn con un hilo de voz.
- Me llamo Jane.
- Es un nombre lindo.
- Gracias.
Pero ya no escuché más porqué Harry me habló:
- ¿Estas enfadada, o me quieres?
- Estoy enfadada y te quiero.
- Tonta. - intenté resistirme a él... … pero fallé en el intento.
- Es difícil estar enfadada contigo, ¿Sabes? - él me hizo una de esas sonrisas que me gustaban. - Vale ya no estoy enfadada. - el sonrió. - Pero déjate de sonrisas, que a la segunda vez se acaba todo. - Él se estremeció.
- Gracias...
- Por favor, prométeme que no me volverás a abandonar.
- Te lo prometo.
- ¡Gracias! Por cierto, ¿Quien conduce el autobús?
- Nuestro man... nuestro amigo Paul.
- Ah, ¡Hola Paul! - sin girarse me saludó con la mano. No lo pude ver con detalles, pero había una cosa que estaba segura; era un tío como un armario.
- ¿Que quieres hacer de mientras?
- ¿Yo? No... - me interrumpió con un beso intenso y apasionado. Harry se apartó, pero yo le agarré sus rizos perfectos y le acerqué para seguir besándolo.
-¡¡PUAJ!! ¡¡Parad!! - Louis tenía envidia de mí, por su bromance con Harry.
- ¡Calla! Que tu ya tienes a Ana. - le dije. Luego me quedé apoyada al hombro de mi rulos. De mientras, volví a escuchar la conversa de Zayn y Jane.
-¿Me das tu télefono? - le preguntó Zayn con timidez.
- Cl... claro... - y luego le dijo.
- Vale, ¡Gracias!
- Haremos una pausa. Necesito gasolina para el autobús. - dijo Paul.
Entonces nos movimos todos y yo me fui con Jane.
- ¿El de los rulos, es Harry? - me dijo ella.
- Si... , ¿A qué es muy mono?
- A mi me gusta más el del mechón... ¿Cómo se llama?
- Ah... Zayn.
- Sí.
- No está mal, es guapo.
- Demasiado.
- ¿Has visto sus tatuajes? A mi me gustan, pero me gustan más los de Hazza.
- No, ¿Lleva muchos?
- Está repleto.
- ¿En serio?
- Claro, y también lleva pendientes.
- ¿De verdad?
- Sí.
- ¿Y a ti te cae bien?
-¡Sí! Es muy majo, solo le he encontrado un defecto.
- ¿Y cuál es?
- Que fuma, no es un defecto, simplemente que no me gusta.
- Vaya...
- Pero creo que lo quiere dejar.
- Así mejor.
- Ahora que lo pienso, es hora de comer. Podemos ir a algún restaurante. - dijo Paul de repente.
- NANDO'S!! - Niall se levantó de su asiento y nos asustó a todos.
- No hay ningún Nando's cerca. - Niall empezó a hacer un berrinche.
Paul recorrió toda la ciudad hasta encontrar uno, a Niall se le pasó de repente. Bajamos todos del autobús, y Harry me cogió por la espalda, no lo pude evitar y chillé.
- ¡No chilles!
- Perdón...
- ¿Sigues enfadada verdad?
- No ya te lo dije.
- Ya lo dijiste, pero no lo demostraste.
- Vale, no estoy enfadada, pero no puedo olvidar lo que he pasado, lo siento.
- Pero ya estoy aquí, he vuelto para no largarme nunca.
- ¡Pero si estamos marchando de mi ciudad!
- Pero iremos juntos a Londres, y compraremos una casa, y viviremos juntos, para siempre.
Sólo en pensar en eso me mareé. Me encantaba Harry pero aún estaba dolorida. ¿Pero vivir con él? Si no llevábamos ni un mes juntos. Bueno mañana hacíamos el primer.
- Harry no llevamos ni un mes...
- ¿Y qué? Yo te amo.
- Y yo Harry pero no sé... Tomate lo con calma, ya llegará el momento.
- Vale... o sea que ¿no quieres?
- No. - me dolió mucho decir eso, pero no estaba preparada.
- Bueno, ya alquilaremos un apartamento para todos... Si es lo que quieres.
- Gracias.
Había metido la pata. Comimos en Nando's, Harry no me hablaba. Solo me miraba, y en sus ojos veía su expresión. Mientras todos hablaban, yo me puse a hablar con él sin que los otros nos escucharan.
- Harry no te lo tomes mal. Te amo con todas mis fuerzas y más.
- ¿Y entonces?
- Harry, te amo, pero no soy ni mayor de edad, acabamos de volver juntos y ya quieres que vivamos juntos, somos jóvenes, y si ¿algo va mal? ¿con quien estaré?, sola en Londres, necesitaré a alguien mayor de edad que cuide de mí, yo sé que puedo sola, pero las leyes no lo aceptan. ¿Entiendes? Si me... Si me abandonas... -esto también dolía, y mucho. Además también dolía que él se estremeció. - Estaré sola, con el corazón roto.
- Repito; Tu... no quieres?
- No. - ahora lo tenia claro.
- De acuerdo...
- Pero Harry eso no significa nada, yo te amo, y nuestra relación supera todos los obstáculos, las cadenas, estoy aquí y no me iré.
- De acuerdo...
- Piensa positivo, mañana hacemos un mes. - le guiñe el ojo.
- ¡¡Anda!! ¡No me acordaba! Jajajjaja era broma, claro que lo sabía, ya tengo preparada una sorpresa...
- Harry yo te quiero dar algo... Pero nada superara tu sorpresa.
- Sólo quiero tu amor, y tu corazón.
- Ya tienes las dos cosas.
- Tonta.
- Tonto. - estábamos saliendo de Nando's.
- Siento cortaros el rollo, pero me llevo a Harry. -dijó Louis.
- De acuerdo pero recuerda que es mío.
Preferimos esperar al día siguiente para ir a Londres, y pasamos el rato por ahí. Tuve una idea, fui a imprimir una foto nuestra, y la puse en un marco de plata, (me quedé casi sin dinero...) y luego hice un escrito que decía:
“Harry, sólo nos conocimos hace un mes, y ya eres la mejor persona que conozco, te amo, y mucho más, no sé que decir de tu, ya lo sabes todo, sabes ya lo que eres para mí, sabes lo feliz que me haces, sabes que no me puedo resistir a ti, y sabes que me da mucha vergüenza reconocerlo, pero lo has conseguido... por un mes y que sean muchos más. De tu novia tonta ∞”
Llegó la noche, y volvimos al autobús, y empezamos el viaje. Me quedé medio adormida en los brazos de Harry, pero no del todo, sentí todo lo que me decía al oído. Pero él creía que yo estaba dormida, pero se equivocaba...
- Cariño te amo, mucho, y todo y que nunca te lo diga, yo también soy tímido, y todo y que no lo parezca, no me puedo resistir a ti tampoco. Por eso volví, y no lo sabes todo de mí, durante la época que estuvimos separados, no lo pasé bien tampoco... incluso peor que tú... estuve bebiendo... lloré. Me me escribí cada día en la muñeca Summer love, y esto de summer love, lo digo no porqué nuestro amor sea un rollo de verano, sino porqué te conocí este verano y es lo mejor que me ha pasado en mi vida. Te amo, y echo de menos cuando me apretabas los rizos con tus pequeñas manos, aquellos momentos solos en la playa, nuestro primer beso, nuestra primera noche, todo son buenos recuerdos, ¡¡¡TE AMO!!! - Y me besó la mejilla. - Buenas noches.
Dios mío. No pude evitar ponerme colorada, y con razón, oh dios cada vez lo amaba más.
- Vale. ¿Estas despierta verdad? - sonreí, aún con los ojos cerrados. - Mierda.
- ¡Si! ¡Soy irresistible eh!
- ¡NO! ¡Era todo una broma!
- Ya...
- Calla ya y duérmete. - Recordé que me estaba muriendo de sueño y ya no me acuerdo de más, ya que me dormí... … en brazos de un ángel.
